El Boletín Semanal del Proyecto de Solidaridad con México

24 de marzo de 2021 / Meizhu Lui, para el equipo editorial

En la Frontera México-Estados Unidos, Mucho Más Que Un Muro

El constante “¡Construye el Muro!” de Donald Trump siempre significaba más que una pared. El lema equivalía “no podemos permitir que esos inmigrantes mexicanos violadores, asesinos y terroristas se acerquen a nosotros a través de nuestras fronteras”. Cantar el lema en los mítines de Trump encendió y consolidó su base de terroristas locales, tanto los del público en general como los que se habían unido a la Patrulla Fronteriza o se habían convertido en agentes de ICE.

 

El mantra de Trump en realidad tuvo un impacto mucho más profundo que eso. Su constante repetición hizo que el público estadounidense se fijara solo en el muro físico. Pero construir un muro implica más que los trabajadores de la construcción colocando vallas. El muro de Trump estereotipa a los migrantes como delincuentes peligrosos. La criminalización de ellos requiere vigilancia, y la vigilancia requiere no solo agentes especializados, sino una amplia gama de armamentos, tecnología de vigilancia y centros de detención.

 

Estos mecanismos de control no solo afectan a quienes intentan cruzar una raya en la arena. Nuestra “frontera” se extiende de 100 millas de ancho alrededor de los Estados Unidos, y los tentáculos de control fronterizo penetran profundamente en las comunidades, hogares y lugares de trabajo de dos tercios de la población estadounidense. No pienses sólo en Tucson o El Paso. A lo mejor tú vives en una ciudad “fronteriza”. Más concretamente, a menos que eres un migrante, es posible que no te haz dado cuenta de que también vives en un estado policial.

 

¿Quién se beneficia de la criminalización de los migrantes como excusa para militarizar la frontera? Todd Miller, en nuestra entrevista de Voces esta semana, mira más allá del muro y desenmascara a aquellos que se benefician de sembrar el miedo, la miseria y la muerte en las familias migrantes. La “seguridad fronteriza” se ha convertido en una forma de tráfico de personas, un gran negocio.

 

Y gran política. La insistencia de Trump en el muro lo convirtió en el blanco de nuestra ira y odio. Pero esa furia dirigida a Trump oscureció los años de contribuciones de campaña de las compañías de seguridad fronteriza que tienen a republicanos y demócratas cómplices en políticas fronterizas inhumanas y desembolsos flagrantemente brutos de nuestros dólares de impuestos en contratos de seguridad privada.

 

Para ganar los derechos de los migrantes y los inmigrantes, tendremos que cortar los lazos entre los especuladores y los políticos. Tendremos que ganar derechos no solo para los que ya están aquí, sino también para los que necesitan ingresar. Necesitamos más que un martillo para destruir más que un muro.

¿Qué es el “complejo industrial fronterizo” de EE.UU.?

 

Todd Miller: La política fronteriza de Estados Unidos desde la década de 1970 se ha centrado cada vez más en tratar como delincuentes a quienes quieren ingresar. No es una respuesta racional ni humana para las personas que tienen que huir de un desastre político, económico o personal, y no es un accidente. Una faceta importante que impulsa la militarización de la frontera es la confluencia de contribuciones masivas a campañas, cabildeo y acceso a funcionarios gubernamentales por parte de las corporaciones de armas, TI, seguridad y detención, particularmente en la era posterior al 11 de septiembre. Estas corporaciones de seguridad fronteriza y sus aliados gubernamentales forman un poderoso complejo industrial fronterizo.

 

¿Cuánto ha crecido el presupuesto para el control de fronteras?

 

Estos presupuestos anuales aumentaron de $350 millones en 1980, a $1,2 mil millones en 1990, a $ 10,2 mil millones en 2005 a $23,7 mil millones en 2018. En otras palabras, los presupuestos aumentaron en más del 6000% desde 1980. Entre 2008 y 2020, El Servicio de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) y el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) emitieron 105,997 contratos por valor de $55,1 mil millones a corporaciones privadas. Son familiares: Boeing, Lockheed Martin, Northrop Grumman, Raytheon, General Dynamics, Palantir, Deloitte, CoreCivic.

 

La militarización de la frontera se volvió más dramática después del 11 de septiembre con la creación del Departamento de Seguridad Nacional, abriendo las llaves para “asegurar” la frontera a pesar de que el ataque del 11 de septiembre no tuvo nada que ver con la frontera mexicana.

 

Para averiguar lo que estas empresas tienen para ofrecer, has acudido a muchas “Exposiciones de seguridad fronteriza”. ¿Cómo es eso?

 

Es como entrar en una especie de película de ciencia ficción futurista. Hay pantallas de drones –que incluyen botes de drones– y robots, cámaras de infrarrojos, sensores de movimiento. Un tipo me hizo una demostración de un aerostato –un globo de vigilancia y comunicaciones, lo puso en mi cuaderno desde lo alto y las palabras aparecieron claramente en una pantalla frente a él. Y los proveedores no se avergüenzan de las posibilidades de obtener beneficios. En la Expo 2017, escuché a un tipo decir: “¡Ahora vamos a ganarnos el premio gordo!” presumiblemente anticipando contratos de la administración Trump. Otro proveedor, de una empresa que normalmente vendía a los militares, me dijo "estamos llevando el campo de batalla a la frontera".

 

Biden ha hecho promesas, y de hecho está mejorando, la situación de los inmigrantes. ¿Cambiará eso la política fronteriza?

 

La estrategia general de fronteras conocida como prevención a través de la disuasión no ha cambiado si hay demócratas o republicanos en la Casa Blanca. Para las elecciones de 2020, las empresas de seguridad fronteriza gastaron más de $40 millones de dólares en contribuciones de campaña a políticos clave. Biden recibió tres veces más dinero en contribuciones de campaña ($5,365,000 de dólares) de compañías de seguridad que Trump.

Se hace pensar que ellos calcularon que Trump ya estaba en su bolsillo, por lo que necesitaban ofrecer algo atractivo a Biden. Es una elección en la que su voto gana pase lo que pase.

 

Si bien la administración Biden parece decidida a revertir algunas de las políticas más atroces de Trump, la situación en la frontera sigue siendo igual. Muchas personas han sido rechazadas para que, como de costumbre, arriesguen la vida cruzando el Río Grande o el desierto de Sonora. Y aunque Biden ha detenido la construcción del muro, ha expresado su apoyo a las siempre rentables tecnologías de vigilancia.

 

¿Qué crees que debe suceder en la frontera?

 

La crisis climática ha causado y causará grandes conmociones en todo el mundo y provocará el desplazamiento de un número extraordinario de personas. En este momento, un sistema fronterizo militarizado global mantiene intacto este mundo insostenible de catástrofe ambiental como siempre y desigualdad endémica. La contención y separación de personas exacerba estos problemas globales e impide soluciones que requieren cooperación y solidaridad transfronterizas. Con COVID y el cambio climático como dos problemas gigantes que la gente enfrenta en todas partes, tal vez este momento pueda darnos el espacio para imaginar un mundo sin fronteras.

La Lucha Continua: El Arte de la Frontera

Paseo de la Humanidad por Alberto Morackis, Alfred Quiroz, y Guadalupe Serrano
(foto de Jonathan McIntosh)

Izq: Tambaleante en el Muro por Ronald Rael y Virigina San Fratello. Der: Kikito por JR.

Ataúdes en la Frontera por Alberto Caro

Reportes y comentarios recientes de medios progresistas y

convencionales, sobre las vidas y luchas en ambos lados de la frontera

 

Kurt Hackbarth, AMLO Is Fighting to Make Mexico’s Energy a Public Resource, Jacobin. The emerging struggle to bring back México’s long-debilitated public energy sector.

 

Jennie Rose Nelson, Reopening Mass Influx Facilities Goes Against Biden Administration Promises, NACLA. Community organizers across the country are calling on the Biden administration to shut down influx facilities for children and instead prioritize investment in community and family-based care, home studies, and post-release services.

 

Biden & Mayorkas: Stop Deportations Now! Mijente. Over 70 immigrant rights organizations are backing a six-step agenda for border justice.

 

John Ackerman, Paternalismo electoral, La Jornada. El Bloque Opositor Amplio ha intentado utilizar artimañas y triquiñuelas jurídicas con el fin de reducir la cantidad de diputados que apoyan a la Cuarta Transformación.

 

Jeff Hauser, Congress Must Examine Biden Admin Possibly Trading Vaccines For Anti-Migration Enforcement, Revolving Door Project. The Biden Administration should not be in the business of trading Mexican lives for those of Central and South Americans who see migration to the US as their best life-saving option.

 

Amy Stillman, México Judge Suspends Controversial Power Law Indefinitely, Bloomberg. A Mexican judge has suspended the AML0 electricity law that favors a state utility over private power companies.

 

AMLO, to Canadian mining companies: give a good salary, pay taxes. Like there. Or lose concession, Market Research Telecast. López Obrador is pressing Canada on two Canadian mining companies operating in México. One refuses to pay taxes, and the other is rejecting a pro-union worker vote.

 

Nora McGreevy, Fire at 16th-Century Mexican Church Prompts Debate Over How to Protect Cultural Heritage, Smithsonian. Critics argue that a lack of preservation funding is adding to the crisis.

El Proyecto de Solidaridad con México junta activistas de varias organizaciones e individuos socialistas y de izquierda comprometid@s a la justicia laboral y global que consideran la elección de Andrés Manuel López Obrador a la presidencia de México como un momento decisivo. AMLO y su partido Morena tienen como objetivo acabar con generaciones de corrupción, empobrecimiento y sumisión a los intereses de Estados Unidos. Nuestro Proyecto apoya no solo a Morena, sino a todos l@s mexican@s que luchan por los derechos básicos y se opone a los esfuerzos de Estados Unidos para socavar la soberanía nacional de México. 

 

Comité editorial: Meizhu Lui, Bruce Hobson, Bill Gallegos, Sam Pizzigati. Agradecemos sus sugerencias y comentarios. ¿Interesada/o en participar? Envíanos un ¡correo!

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